El origen del carnaval, se supone que se halla en las costumbres católicas del antiguo Imperio Romano. Según procede de las fiestas finales que celebraban los romanos católicos en los días previos a la Cuaresma, un período que tiene lugar antes de la “Pascua Cristiana” en donde los devotos, entre otras prácticas religiosas se abstenían de comer carne. También se indica que la propia palabra "carnaval" procede del latín “carnelevarium”, que significa retirar la carne.
Actualmente, la fecha del carnaval sigue dependiendo de los 40 días anteriores a la Pascua, por lo que se celebra en días diferentes cada año, pero siempre entre los meses de febrero y marzo.
Sin embargo, el carnaval puede provenir de las antiguas fiestas romanas a partir de festivales primitivos que se celebraban ampliamente antes de que el cristianismo fuera la religión oficial del Imperio Romano.
Una de ellas es la fiesta que se celebraba en honor del comienzo de la primavera, el año nuevo y el renacimiento de la naturaleza, las celebraciones también podrían relacionarse con las fiestas paganas Saturnalia y Lupercalia. La primera se celebraba en honor del dios Saturno y tenía lugar en el solsticio de invierno, en diciembre. La segunda tenía lugar en febrero, mes de las divinidades infernales y de la purificación para los romanos. Ambas fiestas duraban días y se caracterizaban por la abundancia de comida, bebida y bailes.
En Venezuela tuvo su inicio durante la Colonia y consistía en juegos rudos cuya arma era agua, polvos y otras sustancias. Además, se realizaban bailes callejeros en los que hombres y mujeres compartían gestos considerados amorales. En pleno siglo XVIII el Obispo de Caracas, Diez Madroñero, convirtió el carnaval en tres días de rezos, rosarios y procesiones. Años más tarde el Intendente José Ábalos, le devolvió su significado original y retomó el carnaval, pero con elementos refinados. Se incluyeron comparsas, carrozas y confites para las familias que salían a las calles para presenciar el desfile. Y se procuró eliminar los violentos juegos de antaño.
Hoy esta tradición del carnaval, continua en Venezuela y una de las que mas se destaca por su originalidad y atractivo es la relacionada con los Carnavales de “El Callao”, en el estado Bolívar.
Y dentro esta fiesta se destaca la figura de las “Madamas”, que representan a las matronas y "jóvenes en edad de casamiento", que conformaron la sociedad de esta población.
Las Madamas en su mayoría eran damas afrodescendientes, aunque también las hubo de origen indio, trinitario o provenientes de las colonias británicas y francesas de las Antillas. Esta mezcla de razas y costumbres, dieron origen a manifestaciones culturales propias de esta zona, destacando en especial el ritmo musical llamado “Calipso
Callaoense”, que hoy en día conforma la base de los carnavales de El Callao y que se interpreta básicamente con instrumentos de percusión, como “Stil Ban”, el “Bum-Bac” y tambores de distinto tamaño, a los que hoy en día se unen bajos, guitarras eléctricas y sintetizadores.
"Un verdadero traje de Madama comienza con una enagua larga sobre la que nos ponemos un fondo de algodón ceñido a la cintura. Encima viene el traje, que debe ser de colores muy vistosos. En la cabeza nos ponemos el turbante y en el hombro una pañoleta, ambos de colores brillantes. Finalmente debemos ponernos muchos collares, pulseras, anillos y accesorios", nos señala una de las matronas.
T.A.F.