Aunque conocía referencialmente, quien era Alicia Alonso, ignoraba que era parcialmente ciega. Ayer leyendo un articulo sobre las mejores bailarinas de ballet latinoamericanas, me enteré de este hecho, de allí que decidí hacer esta entrada del blog, sobre ella.
En el mes de octubre de 2019, nos dejó una de las bailarinas más conocidas de la historia, la cubana: Alicia Martínez del Hoyo, conocida internacionalmente como Alicia Alonso, distinguida con el título de “Prima Ballerina Assoluta”, título que sólo tienen, aparte de ella, Yvette Chauvire, Margot Fonteyn, Mathilde Kshessinska, Alicia Markova y Maia Plissetskaya .
Recibió el Premio Nacional de Danza en Cuba,
la Medalla de Oro del Círculo de Bellas Artes de Madrid y también, entre otros
premios, el grado de Oficial de la Legión de Honor de Francia.
Nacida en la Habana de padres españoles, a los 9 años inició sus estudios de ballet que continuo posteriormente en Nueva York. Contrajo matrimonio con el bailarín cubano Fernando Alonso, de quien adoptó el apellido Alonso, que la acompañaría al largo de toda su trayectoria artística.
En Nueva York fue contratada en 1940 por el “American
Ballet Theatre” y en 1943, por indisposición de Alicia Markova, primera bailarina de la
compañía, la reemplazó en el papel de “Giselle” triunfando rotundamente.
En el American Ballet Theatre también trabajó
con Michel Fokine, George Balanchine, Léonide Massine, Bronislava Nijinska,
Antony Tudor, Jerome Robbins y Agnes de Mille, entre otros.
Con Ígor Yushkévich, formó
una de las mejores parejas de baile y juntos participaron en los Ballets
Rusos donde fue estrella invitada entre 1955 y 1959.
Fue la primera bailarina occidental en actuar
en la entonces Unión Soviética y la primera representante americana en bailar
con el Bolshói de Moscú y el Kirov de San
Petersburgo.
Posteriormente fue estrella invitada de otros
prestigiosos ballets como el Ballet de l’Òpera de París, el
Royal Danish Ballet, etc.
En 1948 había fundado en la Habana una
academia de danza junto con su marido Fernando y su cuñado Alberto con el
nombre de “Ballet Alicia Alonso”.
En 1955 su ballet paso a ser el ballet
nacional de su país y cambió su nombre por “Ballet de Cuba” pasando a
denominarse a partir de 1959 “Ballet Nacional de Cuba”, donde compaginó las
actuaciones, las coreografías, la dirección y tareas pedagógicas.
Principales compañeros de Alicia Alonso
Destacamos cuatro de ellos por el tiempo que
estuvieron realizando trabajo interpretativo junto a Alicia Alonso:
- Igor Youskevitch (1948-1959).
- Azari Plisetsky (1963-1972)
- Jorge
Esquivel (1970-1986)
- Orlando
Salgado (1971-1995)
La fortaleza de una artista
Alicia Alonso era parcialmente ciega desde los
19 años, pero esto no fue obstáculo para actuar, venciendo las dificultades que
le suponía tener una visión defectuosa. Su fuerza de voluntad le ayudó a
superar las dificultades apoyada por sus “partenaires” y guiada por las luces
del escenario.
Escuela
cubana de ballet
Alicia Alonso contribuyó a aunar en Cuba los
esfuerzos para promover una “Escuela cubana de ballet”, basada en las
cualidades específicas de un pueblo confluente entre América, África, y Europa.
A nivel biomecánico se caracteriza por un
dominio sobre todo del busto y de los brazos que hacen más livianos el rigor
clásico, acentuando el peso, el aplomo al suelo, la fuerza del impulso y
desarrollando una elasticidad muscular extrema.
Esta escuela se basa en el método Vaganova, creado por quizás la mejor
profesora de ballet del mismo nombre, cuya academia central está en San
Petersburgo.
T.A.F.