El maratón en honor a la Divina Pastora.

 


Ya es acreditado a nivel mundial, cada 14 de enero, se celebra, saliendo del “poblado de “Santa Rosa”, hasta llegar a la catedral de Barquisimeto, se menciona como una de las peregrinaciones con más participación; considerada la tercera más numerosa a nivel mundial, comparándose con la de la Guadalupe en México y la de Fátima de Portugal.

Como buena barquisimetana, devota de la Divina Pastora y entusiasta corredora, no he querido pasar esta oportunidad sin escribir sobre una tradición que, quizás no es tan conocida como la procesión de la Divina Pastora, pero que para los Barquisimetanos se ha convertido en una costumbre, que acompaña esta gran fiesta mariana. Se trata del llamado “maratón” que se realiza en honor a la virgen, el mismo 14 de enero con la participación multitudinaria de “maratonistas” 

Desde las 6 de la mañana, niños, jóvenes, adultos y los un poco más adultos como yo: caminando, corriendo, en bicicletas o en patinetas, parten desde El Obelisco de Barquisimeto, con el disparo de un mortero, donado por la empresa larense “Cohetería Marrufo”, quienes desde la década de los 80 aportan este implemento, como promesa a la Santa Patrona de los larenses.

Esta multitud de personas recorren el oeste, el centro y el este de la ciudad, hasta llegar a las cercanías del poblado de Santa Rosa donde se encuentra la imagen de la Divina Pastora.

Esta tradición se inició en el año 1979 de la mano de Napoleón Arrieche, el profesor Francisco Puerta y Antonio Escalona, entre otros... con la finalidad de recaudar fondos para las Hermanas de la Caridad de la Casa Hogar, Doctor Ramón Esteban Gualdrón, solicitando un aporte monetario dentro de las posibilidades de cada participante y en ese entonces, solo participaban “trotadores” con experiencia y me cuentan, sin verificación de la veracidad, que en el primer “maratón” que se realizó, solo participaron unos 15 corredores, hoy  en día  participan aproximadamente, 30.000 personas.

Los participantes recorren: la avenida Pedro León Torres, prosigue por calle 42 para tomar la carrera 19. Después avanza por la Av. Lara hasta llegar a la altura del restaurante “Tiuna”, donde culmina el evento, un trayecto de aproximadamente 9 Km. En años anteriores, el punto de llegada era en el poblado de Santa Rosa, pero el volumen de participantes era de tal magnitud, que, perturbaban las actividades religiosas, de tal manera que se modificó el sitio de llegada y la “meta” se colocó al final del restaurante “Tiuna” aproximadamente un kilómetro antes de la entrada de Santa Rosa.

Para participar no se requiere inscripción previa, ni pago adicional, tan solo estar en El Obelisco antes de las 6 a.m., para los participantes se trata de un acto de fe y si es de tu agrado, puedes dar una colaboración a las “hermanitas” que están ubicadas al final de la carrera.

Es importante destacar que esta actividad no ofrece premiación y los interesados pueden sumarse al recorrido a cualquier altura del trayecto.

¿Se animan a participar?, ¿nos encontramos antes de la 6 de la mañana en el Obelisco de Barquisimeto?

T.A.F.



Los Reyes Magos

 


En la Biblia y más específicamente en,  El evangelio de San Mateo que se encuentra en el Nuevo Testamento, se menciona la existencia de “magos” que querían adorar al Niño Dios, que había nacido. Unos magos, sin especificar el número, fueron guiados por la llamada estrella de Belén, que los llevaría al pesebre elegido.

Sin embargo, antes de llegar a su destino, visitaron al rey Herodes en Jerusalén y le preguntaron por el niño. Este les dijo que, debía haber nacido en Belén. No obstante, el rey Herodes les pidió que cuando regresaran les diera la ubicación exacta del lugar donde había sido alumbrado pues pretendía ir a adorarlo.

Los magos, pronto fueron advertidos de las malas intenciones del monarca, quien pretendía asesinarlo. Así que, después de visitar al Niño Dios y entregarle los regalos, regresaron a sus hogares sin pasar por la ciudad de Jerusalén.

Fue a partir del siglo III cuando, el Papa León I, estableció que los magos fueran llamados reyes, pues se pensaba que se trataba de gente con grandes riquezas. Además, se establecería que fueron 3 pues, 3 fueron los regalos llevados.

Los nombres con los que conocemos a los Reyes Magos: Melchor, Gaspar y Baltasar, aparecieron por primera vez durante el siglo VI en el mosaico de San Apollinaire Nuovo, en Rávena, en esta imagen llevan una vestimenta al estilo persa que se transformará durante el siglo XV. En ese siglo, la apariencia de los Reyes cambió de tal manera que pudieran representar las tres “razas” de la Edad Media. Fue así como Melchor representaba Europa, Gaspar, Asia y Baltasar África.

Tuvieron que pasar algunos siglos para que la tradición de los Reyes Magos fuera parecida a la que conocemos ahora. Esto sucedió durante el siglo XIX, cuando, en España, se convirtió la noche anterior a la Epifanía en Noche de Reyes. A la mañana siguiente, los niños encontraban obsequios en el conocido Día de Reyes. A partir de la segunda mitad del siglo XIX, la celebración se extendió hacia países de la America Latina.

T.A.F.