El edadismo.


Hace dos semanas mi amiga de la infancia María Auxiliadora, me envió un video de María Teresa Baró, el cual me parece un poco largo para colocarlo en el blog, pero búsquelo en google, se refería a la discriminación por la edad. Este hecho me trajo el recuerdo de mis años de actividad laboral, siempre en el área de Recursos Humanos, donde se mantenía el criterio de no contratar “mayores de 50 años” como una condición alusiva a los relegados para muchas cosas, como por ejemplo el empleo, y creo que este criterio sigue arraigado en el mundo laboral, pero lo grave es que no solo el ámbito profesional minusvalora a las personas mayores, sino que, en una sociedad de máximo éxtasis hacia la juventud, ser mayor supone, con mucha  frecuencia, una condena.
A este contexto apunta el llamado edadismo, término acuñado por el psiquiatra  Robert Butler en 1968, para referirse a la discriminación de las personas mayores, basada en prejuicios y estereotipos respecto a la edad, el cual es considerado como una de las tres grandes formas de discriminación de nuestra sociedad, por detrás del racismo y el sexismo, pero una forma de discriminación poco conocida,  que afecta a millones de personas en sus vidas cotidianas.
Se acepta socialmente, que las personas mayores estamos en una fase de declive en nuestras vidas, que se sintetizaría en una gradual reducción de las capacidades físicas y mentales.
La discriminación que vivimos por el hecho de tener una edad avanzada ha sido poco difundida, diría que silenciada, lo cual nos hace mucho más vulnerables.
La vejez no es una enfermedad sino una etapa de la vida, pero en una sociedad, como la nuestra, individualista, cumplir años se relaciona con mayores posibilidades de vivir en aislamiento social, razón por la cual, la vejez se le caracteriza como un problema de salud pública, como una enfermedad. Se debería tratar de edificar una sociedad para todas las edades, otorgándole, el respeto, el prestigio y el valor que cada una de ellas se merecen
Estoy consciente, que con los años se nos hace más difícil aceptar los cambio y no es posible detener avance tecnológico, lo cual ha contribuido a que la vida se nos haga más difícil, la tendencia a la desaparición de la prensa escrita, el uso de “e-book” en vez de libros de papel, el uso de celulares, el uso de la internet para cualquier trámite, el manejo de tarjetas de crédito…son cosas cotidianas, que si no tenemos la formación en estas nuevas tecnologías se nos complica la vida y tendemos a aislarnos o hay que pedir ayuda y allí, empiezan los reproches de los que nos rodean, también reconozco de nuestros “achaques”, de nuestras limitaciones, pero creo que una sociedad que no sabe reconocer el talento, la belleza, por supuesto no física, la sabiduría y todo aquello que aún podemos aportar es una sociedad que carece de salud, está enferma. ¿Tú crees que si existe el edadismo? ¿Crees que hay desconsideración para las personas mayores?
T.,A.F.